"Prohibido aconsejar, prohibido decir"bien", prohibido decir"mal.""
Y, de repente, el grupo empieza a vibrar. Todos empezamos a sentir cosas por dentro y por fuera y por todos los lados.
Uno empieza a hablar de uno, sin miedo, sin censura, y se descubre. El a el.
El otro se ve en el, dónde antes no había nada, ahora hay vida. Estamos vivos. Somos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario